¿Tus antiguos grifos han perdido el brillo y te has enamorado de los modelos de última generación? ¿Deseas adaptar tu grifo actual a un conjunto para sacarle el máximo partido? Quizá sea el momento de someter a un lavado de cara a la grifería de tu cuarto de baño. Al fin y al cabo, hablamos de una de las estancias esenciales de nuestro hogar, por lo que se antoja necesario hallar el punto de bienestar necesario. Y la comodidad se encuentra en pequeños detalles que consiguen grandes sensaciones.
Tenemos la mejor respuesta para tus necesidades: el sistema de grifería empotrada.
Se trata de una solución que no solo garantiza el cumplimiento de las misiones básicas de un grifo. Además, se mimetiza con el entorno, consiguiendo una estancia moderna y de diseño. Has de añadir a estas virtudes las mejores calidades y precios razonables. Este método supone un nuevo concepto de ducha que está ganando popularidad entre los usuarios. Una tendencia de reciente creación que cuenta con una serie de prebendas que te enumeramos a continuación.
Ventajas de los sistemas de grifería empotrada
- Amplitud. Con esta fórmula ganarás extensión, puesto que la superficie en la que se sitúa la instalación queda despejada. Por tanto, este procedimiento regala desahogo, favoreciendo el máximo aprovechamiento del espacio. También conseguirás que uno de los lugares más relevantes de tu casa resulte más accesible.
- Estética. El interiorismo no solo se circunscribe al salón o a la habitación. El baño también es susceptible de adueñarse del mejor arte decorativo. En el caso de la grifería empotrada para la ducha, no solo contemplamos modelos que acaparan las miradas, sino que esa sensación de amplitud mencionada con anterioridad contribuye a aumentar el atractivo de tu estancia. Además, los diseños actuales se integran a la perfección con el resto del mobiliario con sus líneas equilibradas y de acabados neutros.
- Facilidad de limpieza. Las labores del hogar son tareas incómodas la mayoría de las ocasiones. Más aún si hablamos del cuarto de baño. Así que, si quieres ahorrarte tiempo (y resoplidos), apuesta por este sistema. De esta forma, tu estancia no acumulará suciedad de manera tan precipitada como lo hace la grifería tradicional.
- Numerosas posibilidades de combinación. En la pared o en el techo. Este sistema presenta diversas alternativas de colocación. Además, los variopintos rociadores que existen permiten jugar con el espacio. Por tanto, podrás aportar tu toque a la puesta en escena de tu cuarto de baño, gracias a una fórmula que se adapta al tamaño de tu estancia y a tus predilecciones.
Falsos mitos
Seguramente habrás escuchado que los grifos empotrados salpican. Se trata de una teoría errónea. El que se derrame más o menos agua no depende del objeto en sí mismo, sino de la altura del caño o la dirección del chorro. También está extendida otra afirmación equivocada acerca de este sistema, la que habla de una instalación complicada, pero si cuentas con el profesional adecuado el resultado será impecable y tu satisfacción completa.