Los restaurantes han dejado de ser solo un lugar donde comer para convertirse en lugares donde disfrutar de momentos únicos rodeados en muchas ocasiones de decoraciones espectaculares. La decoración se han convertido, además de la comida, en un reclamo para atraer clientes, construyendo una atmósfera propia y diferencial. En este juego de atracción, los baños también son ahora objeto de decoración y nos sorprenden en ocasiones por su espectacularidad. Espacios únicos de alta decoración por donde los comensales pasarán a lo largo de la comida o la cena. Vemos algunos de estos baños inolvidables que harán que sean motivo de conversación cuando regresemos a la mesa.
En Estados Unidos decorar los baños de los restaurantes tiene hasta un concurso donde se premia el "mejor baño de América". Esta tendencia por ampliar el cuidado y la exquisitez decorativa a los cuartos de baño se ha impuesto en aquellos locales que sorprenden por su gastronomía pero también por su decoración.
Revestimientos espectaculares, con papel pintado, con pintura, con azulejo o con una mezcla de ambas. Espejos imposibles que son el centro de atención o iluminaciones muy cuidadas que crean ambientes únicos son elementos que no pueden faltar en este tipo de espacios. Los lavabos, uno de los elementos centrales, sorprenden por sus formas, a menudo contruidos sobre islas o con formas y diseños a medida.
La grifería se convierte en un objeto de diseño donde los interioristas pueden experimentar para crear en espacios únicos que no pueden aplicarse a viviendas. En el restaurante Cibo Wine de Miami, por ejemplo, los grifos nacen del techo y se activan por sensores de movimiento. Mientras te lavas las manos puedes disfrutar de las creaciones del artista Randy Cooper.
El arte también se cuela en el espectacular baño del Patio de Leones de Madrid. Azulejos pintados a mano en un proyecto de Sergio Mora y una réplica de del Patio de los Leones de la Alhambra de Granada.
Y estos baños únicos cada detalle cuenta y los objetos decorativos son una continuación de todo el local. A menudo el usuario no sabe si sigue en el restaurante o está en el cuarto de baño. Otro ejemplo de decoración exquisita es el Zalacaín de Madrid, una referencia gastronómica desde hace décadas. No en vano fue el primer restaurante de nuestro país en el alcanzar las tres preciadas estrellas Michelín. Sus baños rebosan elegancia con su decoración con rosas y su exquisito cuidado por el detalle. Sin duda, un reflejo de la cocina del restaurante madrileño.
La decoración de los baños se integra totalmente con el estilo de restaurante como el caso del asiático Don Lay diseñado por Cousi o el Victoria Brown de Buenos Aires. En cada uno de ellos el espacio se adapta al ambiente y no abandonamos la atmósfera del local. Los farolillos típicos de los barrios chinos o bien el estilo industrial con una ambientación de antigua fábrica de finales del siglo XIX hacen que los baños sean también un lugar digno de visitar si vamos a cenar.
Si tienes la suerte de comer en buen restaurante ya sabes que no dejes de visitar sus baños, seguro que te sorprenderás.