El cuarto de baño es una de las partes de la casa que usamos con una frecuencia más elevada. Es altamente importante mantenerla limpia, ya que un baño sin los cuidados pertinentes puede resultar en atascos involuntarios, aparición de humedades o incluso hasta moho. Todo esto, sin mencionar que por culpa de lo anteriormente mencionado aparezcan los temidos malos olores y problemas que solo se pueden solventar con un fontanero o con un gasto monetario indeseado.
Para evitar este tipo de situaciones, aquí se mencionan algunos consejos prácticos y trucos para mantener la salud de tu baño como el primer día:
- 1. Usa agua caliente y vinagre
- 2. Evita la acumulación de cabello en el desagüe
- 3. Truco del “Tapón anti-olor”
- 4. Ambientador cítrico
- 5. Mantén una buena ventilación en el baño
- 6. Evita tirar productos
- 7. Limpia periódicamente el baño con productos adecuados
Limpia al menos una vez por semana el desagüe de tu lavabo y ducha con una mezcla de agua caliente y vinagre de limpieza, este remedio te ayudará a deshacerte de residuos como el jabón solidificado, suciedad o cal, actuando como desincrustante suave. Para que la limpieza sea efectiva, déjalo actuar unos minutos antes de enjuagar.
El cabello es el principal causante de los atascos en las tuberías. A la hora de ducharnos, el cabello se cae y se quedan atrapados en la rejilla o en el propio desagüe. La acumulación de cabello puede obstruir la salida del agua de tu plato de ducha y provocar un encharcamiento, además, puede acumular restos de jabón y restos que posteriormente generan malos olores.
Una vez has limpiado tu baño, pero a los días sigues notando que hay olores desagradables, puedes usar este truco para eliminarlos. Este truco es muy fácil de hacer en casa y puede acabar convirtiéndose en tu aliado, es una combinación de bicarbonato y vinagre de limpieza que ayuda en una limpieza profunda de tu sifón, así mismo, neutraliza los olores que provengan de las tuberías. Es recomendable que se espere un mínimo de 15 minutos para que la mezcla haga su efecto, una vez haya transcurrido el tiempo puedes enjuagar con agua caliente.
El uso de cítricos como lo son el limón o la naranja, ayudan a mantener las tuberías limpias y libres de malos olores. Esto es gracias a sus componentes naturales que aportan un aroma fresco que se mantiene durante un largo tiempo. Además, ayudan a eliminar restos de grasa y suciedad que se adhieren a las paredes de la tubería.
Para ello, utiliza la ralladura de la cáscara de un limón o naranja e introdúcelo dentro del desagüe. Posteriormente, vierte agua muy caliente para que vayan expulsando su aroma. Para tener un mayo efecto, utiliza el zumo de limón o naranja y viértelo antes del agua caliente.
Este truco lo puedes emplear una vez por semana, manteniendo de esta forma un aroma agradable en el baño y previene la acumulación de residuos.
Muchas veces los malos olores no solo vienen de las tuberías, sino debido al exceso de humedad, favoreciendo la aparición de moho y bacterias. Tener una buena ventilación como, abrir las ventanas o en su caso, instalar un extractor de aire, ayudan a reducir la humedad. Cambiar las toallas con frecuencia y dejarlas secar cerca de un punto con buena ventilación o en su caso en zonas de calor puede hacer que disminuya la humedad del baño. Otra opción aconsejable sería hacer uso de un deshumidificador, manteniendo el ambiente más seco y contribuye a prevenir malos olores y condensación en superficies.
Algunas de las causas de obstrucción en las tuberías, se debe porque muchas veces tiramos productos no desechables que no deberían caer por el desagüe como pueden ser, toallitas, algodones o restos de cremas corporales. Aunque hay productos donde en sus envases digan que se pueden desechar, no significa que desaparezcan de inmediato. Para ello, es recomendable contar con una pequeña papelera para tirar los restos.
Otra de las causas de los malos olores, se deben por un sifón vacío o una junta deteriorada. Cuando un lavabo, una ducha o un inodoro lleva mucho tiempo sin usarse, el agua del sifón se puede evaporar, por lo que facilita la subida de olores desde el desagüe. Para evitar este tipo de situaciones, únicamente abre el grifo durante un par de minutos y de esta forma volverá a rellenarse el sifón. Lo mismo pasa con los inodoros, abre la llave de paso y deja que se llene del todo el tanque, tira un par de veces de la cadena para que transcurra el agua.
Por otro lado, aun con las limpiezas puntuales, realiza de vez en cuando limpiezas profundas con productos adecuados, sobre todo en zonas que sean fáciles de pasar de largo, como juntas, desagües, etc. Mantener estos puntos limpios y secos ayuda a prevenir acumulaciones y alarga la vida útil de las tuberías.
Cuidar del cuarto de baño es sencillo si haces un correcto uso y mantenimiento de este de forma regular. Con estos consejos puedes prevenir malos olores, atascos y mantener tu baño siempre limpio y fresco.
